Adiós 2020… ¡Hola, 2021!
Propósitos de año nuevo
Llevamos toda la semana dándole vueltas al tema… Que sí, que el 2020 ha sido un año durísimo que todos queremos dejar atrás… Que sí, que el 2021 solo puede traernos cosas buenas y la esperanza de que, por fin, todo va a salir bien.
Ya pasó el momento Campanadas, el momento vestidos acertados o desacertados, el momento “¡son los cuartos!”, el momento Concierto de año nuevo y el momento “en mi móvil no cabe ni un solo meme, felicitación o vídeo más”.
Así que, en este inicio de enero, como todos los años, hay que confeccionar una lista de buenos propósitos y parece que, en la de este 2021, nuestras prioridades se han modificado bastante… ¡Y eso nos afecta directamente!
¿Sabíais que casi la mitad de los españoles da más valor a su hogar tras el confinamiento? Así lo afirma un estudio realizado por Sigma Dos para la firma Ikea y que hace una radiografía sobre lo que ha supuesto el hogar durante y después y qué cambios de intereses se han producido en este período con respecto al mismo.
Por todo ello, sí, nuestras casas están en el top ten de nuestra lista. Las mejores aliadas en este mar de incertidumbre. El lugar que nos protegió (y sigue protegiéndonos) a nosotros y a la gente que queremos. Donde pasamos ahora nuestro tiempo de ocio e incluso de trabajo…
Así que hoy, hemos decidido empezar “la lista por el tejado” 😉 y dejaros algunas recomendaciones de qué hacer y de qué deshacerse en este inicio de año tan atípico.
¡Comenzamos!
1. Un espacio para recibir(nos)
Es importante disponer de un área, aunque sea pequeña, para poder hacer esa importante transición entre el exterior y el interior. Un lugar donde descalzarse, quitarse la chaqueta, dejar las llaves, el bolso… ¡Pero nada de zapatos apelotonados y perchas llenas! Si no dispones de suficiente espacio para colocar un gran zapatero o un pequeño armario, no acumules todo en este espacio de cualquier manera. Recuerda mantenerlo al día y guardar convenientemente lo que ya no vayas a usar.
[2. Jubila el sofá de antes de la guerra
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El sofá es, junto a la cama, el mueble de la casa por excelencia. Sí, es importante, muy importante, su calidad. Si todavía duermes tus siestas en el viejo sofá de la abuela, tienes que pedirles con urgencia a los Reyes Magos que te ayuden a renovarlo. Ten en cuenta que estará contigo muchos años, así que seguro que amortizarás la inversión.
Por cierto, si sueles tener invitados en casa y no tienes una habitación extra, una magnífica opción es un sofá cama, aunque los mejores suelen picar bastante alto…
3. Y se hizo la luz
Nos conocéis y sabéis que somos ultrapesados con este tema. Pero no nos cansaremos jamás de repetiros que la luz natural mejora el bienestar de las personas. Así que hay que intentar potenciar esas entradas de luz, cambiando las cortinas, por ejemplo, o la disposición de los muebles para que puedas aprovechar mejor esos puntos de luz externa.
Si por cuestiones logísticas, no puede ser, añade puntos de luz artificial utilizando apliques o focos direccionales para orientarlos hacia las zonas que más te interese iluminar. Si los diriges hacia la pared, por ejemplo, la luz “rebota” e ilumina de manera indirecta.
Apunta en tu lista hacerte con potenciómetro para todas las lámparas, así regulas la intensidad de la luz y cambias la atmósfera con muy poca inversión…
4. Austeridad y orden
Menos es más, recuérdalo. Cuando un espacio no es muy grande, lo ideal es colocar pocos muebles, de esta forma resultará más acogedor y agradable. Quizás ha llegado el momento de mandar a paseo esos muebles “inútiles” (léase la vitrina para la vajilla) y darle a tu hogar un giro más funcional: encontrar soluciones que nos permitan aprovechar espacios para almacenar y mantener el orden.
¡Allá van algunas ideas! Cambia el somier por un canapé, instala altillos, aprovecha cada milímetro de tus muebles de cocina y usa distintas alturas dentro de los armarios para que quepan más cosas… Y lo más importante: hay que hacer limpieza, porque la mayoría de las veces no se trata tanto de falta de espacio como de poca planificación en el orden. ¡Y lo sabes!
5. Un detalle lo cambia todo
A veces basta con un toque de personalidad y ¡chas! Todo cambia como por arte de magia. Una lámpara nueva, un espejo bien colocado, el color de la ropa de cama o los cojines del sofá…
Así que ya sabes, agarra la varita y busca ese detalle que puede hacer cambiar el aspecto de toda una estancia. Las palabras mágicas son observación, inspiración y atrevimiento. ¿Te animas con el hechizo?
6. Una ventana hacia el mundo
La terraza, el balcón oel patio son espacios que están ahora más valorados que nunca. Es importantísimo cuidarlos y decorarlos con muebles funcionales, con plantas que nos permitan rodearnos de un ambiente refrescante y con textiles que los hagan más cálidos y acogedores.
Sin embargo, no todas las casas disponen de estos exteriores, así que te proponemos que busques un rincón cerca de una ventana y lo reconviertas en un espacio de relax donde poder tomar un café, descansar, leer y dejar que el sol te dé en la cara. Un asiento colgante puede ser útil en casa de falta de espacio en el suelo.
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7. Una segunda oportunidad
¡Echa un vistazo al baúl de los recuerdos! Visita el trastero o pregunta a la familia y amigos, a lo mejor encuentras un tesoro… El término vintage, al fin y al cabo, es eso, y en decoración, todo vuelve, y algunas antiguas piezas pueden darle a ese rincón (antes inadvertido) una personalidad arrolladora… Además, tu bolsillo, te lo agradecerá. No todo va a ser comprar e invertir ¿no crees?
Esperamos que tu lista de buenos propósitos incluya alguno de los homeconsejos que te hemos traído hoy. A veces, nos olvidamos de mantener nuestro hogar como realmente anhelamos y somos capaces de vivir con un sofá que se hunde, con una silla como perchero o con aquellos muebles que juramos regalar cuando alquilamos nuestro piso…
Y si lo que quieres es una decoración integral de tu vivienda… ¡Llámanos! Buscamos el mobiliario perfecto y adaptamos cada espacio a tus necesidades y preferencias. No dudes en consultarnos.
¡Feliz año, homedecorers! Seguro que viene cargado de ilusiones.
